El Voyerista

• ¿Del código rojo a la Fiscalía muda y sorda?

Por Alfredo Guzmán

Corrían los últimos días de diciembre del 2021, cuando de pronto todo fue movilización, luego de que se denunció un supuesto intento de levantamiento de un amigo del papá de la gobernadora de Guerrero Evelyn Salgado Pineda, por allá por la zona del Polideportivo en Chilpancingo.
No había fiscal, pues la exhibición de un vídeo, lo presentaba en pláticas con quien sabe quién y eso hacía suponer que negociaba nadie sabe qué. Y renunció.
Retenes carreteros, movilización del ejército, policía preventiva y del estado. Bueno, hasta la Guardia Nacional. Alguien aseguró que eso era un “Código Rojo”. Que al otro día, fue ratificado por el gobierno estatal y municipal en turno, que asumieron, hasta presumiendo que eso había sido.
El supuesto código rojo, que sólo sirvió para exhibir la inoperancia de la seguridad pública estatal, municipal y del ejército y Guardia Nacional, pues no hubo ningún resultado, ni siquiera dieron con la unidad con las características denunciadas. Y el amigo del gobernador, no presentó denuncia.
Es decir, puro pancho y show, sin sentido. Que exhibe que no se tiene orden, coordinación ni estrategia para operar un cierre de emergencia de las salidas de la capital del estado.
Hoy ya hay Fiscal y es militar. Teniente Coronel. No tengo datos si ya hay rotación, cambios en las coordinaciones y nuevos nombramientos y responsabilidades.
La Fiscal, en un club de Toby, pues en la Fiscalía, las mujeres son marginales. Los machos y comandantes dirán que es cosa de hombres, pero no es así. Las responsabilidades son compartidas entre todos y todas.
En un ámbito donde la corrupción es a ojos vistas, llega una mujer acompañada de militares a tratar de poner orden.
En la Fiscalía, la justicia es un negocio. La protección también. Las coordinaciones y las comandancias, igual.
El caso, es que con estas mulas ay que arar. Y en menos de 30 días, la Fiscalía tiene un problema, a donde lo han orillado varias muertes, que han cimbrado a la sociedad. Porque parece que las muertes en los pueblitos, donde se matan a diario entre sí o los van y los matan grupos de poder que no pertenecen a las autoridades reconocidas, son cosa común. Y no importan.
Salvador Barragán, Saúl Astudillo y Roberto Morales, son nombres que quizá no le digan nada a las autoridades, porque parecen sordas y mudas.
Al primero, líder de una organización armada ciudadana, que se asegura da seguridad ante el fracaso de las autoridades que debieran hacerlo en Tierra Colorada, fue exhibido y asesinado, por estar involucrado en presuntos actos delictivos, que siguiendo la ley de la selva, lo ajustician y aparece en bolsas.
El segundo un político, empresario de Tixtla, integrante de familias con arraigo en la zona, acompañaba a su tío, a ser enterrado por su reciente fallecimiento y fuera del panteón fue acribillado, ante la vista de todos y nadie vio nada. Ni las autoridades municipales, ni estatales, ni federales.
El último, un empresario de Acapulco, propietario de unas 12 farmacias de nueva creación, fue sacado de su domicilio y encontrado 24 horas después por la zona de Paso Texca, asesinado.
Con la inseguridad desbordada y los nuevos gobiernos, de todos los niveles, ni oyen ni ven nada.
Y al parecer están mudos. Bueno, andan de fiesta en ferias pueblerinas, y festejando que es buen negocio llenar plazas de toros y espacios donde caben 300 con más de 700, y exponiendo a la gente a infectarse de lo que anda provocando saturación de hospitales, sin medicinas ni insumos.
Empresarios de Acapulco, han denunciado recién, que la extorsión a negocios en el puerto, se ha desatado, desde hace meses y nadie hace nada. Asegurando que los operativos, solo fueron declarativos y ahí están, pero sin funcionar ni resolver nada.
Claro, la extorsión, tiene que ver primero con la policía preventiva y luego con la investigación, si hay denuncia, pero se ha observado que quien denuncia, es sacrificado en represalia a su denuncia.
Esto es lo cotidiano en Guerrero. ¿Cuándo y porqué habrán de empezar a dar resultados, nuestras autoridades?
La sociedad se los premiará. O se los reclamará.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *