- La retórica de las promesas
Por Ernesto Rivera Rodríguez
Las propuestas de las dos campañas de la hoy gobernadora Evelyn Salgado Pineda y la del senador -su papá- Félix Salgado Macedonio, porque fueron dos campañas, de entrada se desvanecen desde el mismo mensaje político de su toma de Protesta, tal vez fue una medida tomada por el rigor político y social que ello postulaba. La restructuración de la administración estatal con la desaparición de secretarias. Tales argumentos de campaña, rompieron en su momento preocupación entre los guerrerenses, pues es de obvio conocido que es la administración estatal el mayor empleador del estado.
La tarde del pasado 15 fueron presentados y tomados la protesta de los VEINTE, si los 20 titulares de las secretarias y tomado su protesta.
En su mensaje inaugural la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, No toco el asunto de la disminución de las secretarias era en ese momento como pretender ponerle el cascabel al león.
Es de entender que para modificar la superestructura del gobierno estatal se requiere un profundo estudio, análisis de la viabilidad de los cambios que tendrían por Ley que proponerse al Congreso del Estado, y por lo que se percibe de inicio eso no va a suceder. Sin mencionar la bronca con los sindicatos y su carácter socio económico. Existen de entrada mucho mayores prioridades, que son como se dice en el argot oficial «de pronta y urgente resolución». El horno No está para bollos.
Los temas torales del paradigma actual de Guerrero fueron tocados con dos o tres palabras, o mencionadas «como refritos de la mañanera», austeridad, combate a la corrupción del país más corrupto del mundo, el respeto a los derechos humanos y la libertad de expresión, cuando son puestos en el banquillo de los «conservadores o neoliberales» un día sí y otro también sólo por no estar de acuerdo con la manoseada 4T.
El dicho popular afirma, que de «la moda, lo que te acomoda» y en Guerrero se ha puesto de moda el «combatir la trata de blancas» y tomo como punto de inflexión «,la venta de niñas», que en todo caso la gravedad del tema es mucho más de carácter antropológico e histórico que político, cómo ni siquiera ponerlo en el papel de los compromisos cuando se requiere de un profundo cambio en la misma forma y fondo del quehacer político, que de entrada no existen visos de ello, cuando lo que se advierte es la promulgación de la aplicación de un populismo barato y «cachondeador» para continuar en campaña…Lo que es arriba es abajo.
El slogan de «Orden y Paz» fue severamente cuestionado, aunque sus resultados fueron evidentemente positivos, hoy se «promoverá la cultura de la paz para atacar las causas de la violencia» (sic.) Lo mismo pero más barato, en lo cual fue instalado el caso de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, catalogados de entrada como luchadores sociales. Sí. En la misma línea del movimiento 2 de Octubre. «Nunca más en Guerrero un caso Ayotzinapa», prometió.
En esta vuelta de timón político, la brújula de Guerrero, parece no tener Norte, o lo que es peor, una brújula con dos manecillas, apuntando a diferentes partes, resultado de la «sociedad líquida» que padece la entidad suriana. La gobernadora Evelyn Salgado Pineda tiene la tarea, la responsabilidad y compromiso de volver a cohesionarla, de tomarla y dirigirla con su propia mano, y que No se le haga polvo entre sus manos.