- Armando Aparicio, un acapulqueño para Los Cabos.
Por Ernesto Rivera Rodríguez.
«Abandoné Acapulco por la inseguridad, la creciente situación había convertido a la Ciudad en un campo de tiro», hoy 15 años después he depositado mi esfuerzo, mi preparación en un gran proyecto político social. Abanderar desde las filas de el Movimiento Estatal Independiente de Baja California Sur, y alcanzar dicho proyecto por la candidatura a la Alcaldía de Los Cabos, Baja California Sur, Movimiento que suma hoy 24 candidatos independientes a diferentes candidaturas en la entidad.
En la tierra que lo vio nacer y le dio la oportunidad de prepararse, egresado del Instituto Tecnológico de Acapulco, hoy ha puesto los ojos desde la sociedad civil, en abanderar las verdaderas y profundas causas «cabeñas»: la marginación, la falta de servicios, la descriminscion y sobre todo la real falta de representación político y Social.
Con 15 años de residencia, ya oficial en la ciudad y destino turístico más importante de Baja California Sur, Los Cabos, hace un breve pero sustancial repaso del porqué ha tomado está decisión, abanderar las causas sociales tomando distancia de los partidos políticos cuyos grupos casiquiles tienen y pretender mantener el ritmo de su poder político, en tanto «nosotros», afirmó luchamos y trabajamos por romper esos paradigmas y devolverle dignidad y fuerza a una sociedad abida de un verdadero cambio.
No hay comparación alguna entre Acapulco y Los Cabos como destinos turísticos, y afirma, Acapulco es pese a todo emblemático, Los Cabos producto del desarrollismo oficial, al igual que Can Cun, Quintana Roo y Puerto Vallarta, Nayarit. Después nacería Huatulco, Oaxaca. Estos dentro del territorio continental, Los Cabos en una Insula, porque eso es Baja California, separada por un mar, el Mar de Cortes, franja de tierra que desde siempre poco a importado a las políticas del Centro, y en este proceso electoral ya está entredicho su triunfo por la imposición de su Precandidata a la gubernatura. Los bajacalifornianianos del sur hemos pasado del hartazgo a la desilución en tan sólo dos años.
Esto es una inicultable realidad nacional.
Con cerca de 70 mil guerrerenses habitando en Los Cabos, en un estado cuya población no supera los 600 mil habitantes, Armando Aparicio es ya no solamente un referente empresarial, sino una realidad política y social que viene impactando y consolidando consensos entre los más diversos grupos cabeños e impactando en los guerrerenses ya «cabellos» en su mayoría trabajadores de la industria sin chimeneas que durante decenios han sido controlados por el oficialismo de la CROC, que hoy ven en Armando Aparicio, una oportunidad para romper los paradigmas del abandono, la marginación conque las políticas centristas y casiquiles locales hasta hoy han mantenido a ese polo turístico peninsular.