- Gobernadora sensible, gobierno fuerte
Por Francisco Javier Flores V.
Dicen que la fortaleza se demuestra en la capacidad de saber sobreponerse a la adversidad.
En los tiempos tan complicados que se viven en Guerrero, mantener a flote el barco en medio de aguas turbulentas y tempestades que se suceden una tras otra, sin duda amerita un doble reconocimiento.
Triple, cuando se conjuga con la condición de género en una sociedad donde el machismo ha sido tan arraigado y de repente llega la primera mujer a tomar las riendas de la administración pública estatal.
La gobernadora Evelyn Salgado Pineda no podía encontrar mejor manera de celebrar el tercer aniversario de su mandato que trabajando y demostrando que el suyo, contra todo lo que digan los detractores de siempre, es un gobierno fortalecido.
Sin duda, el sello característico de la joven y guapa mandataria es la sensibilidad, reflejada en múltiples programas de atención a los sectores más vulnerables, lo que se traduce en un amplio respaldo social.
Implementación de becas, acciones en materia de salud, educación, entrega de apoyos sociales, aparatos funcionales, viviendas, además de atender –y solucionar, que es lo más importante- problemáticas e injusticias heredadas del pasado, destacan en estos tres años en que se cumple la primera mitad de un gobierno diferente al que los guerrerenses estábamos acostumbrados.
Y es que solo un gobierno diferente y sensible antepone el diálogo antes que sucumbir al prurito del abuso de poder o la represión. Así, Evelyn prefiere atender a los grupos sociales, escuchar, abrir las puertas, llamar a la paz, e incluso ir ella misma al encuentro de los grupos que deciden manifestarse. Lo ha hecho más de una vez.
Sólo un gobierno con esas características ha podido impulsar programas de verdadero respaldo a las mujeres como el Protocolo Violeta, Transporte Violeta, Tarjeta Violeta, arropando a ese sector que durante años fue sometido, maltratado, violentado.
Con esa sensibilidad de emprender acciones inmediatas para atender a la población damnificada ante desastres naturales, coordinándose de manera eficiente con el Gobierno Federal, gracias a las excelentes relaciones que mantiene con los dos mandatarios nacionales con los que le ha tocado convivir, Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum Pardo, convirtiéndose en la mejor gestora que hayan tenido los guerrerenses.
Es cierto, a Evelyn Salgado le han tocado tiempos difíciles y la adversidad campea en Guerrero a cada paso, pero ya lo dijo el filósofo Séneca: “No hay árbol recio ni consistente sino aquel que el viento azota con frecuencia”.