- Fiscalía: Ayudar o estorbar
Por Francisco Javier Flores V.
A la postura asumida por la teniente coronel Sandra Luz Valdovinos Salmerón de negarse a dejar el cargo de Fiscal General del Estado, después de que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda anunciara que pediría su remoción, por los motivos que a estas alturas ya todos conocemos, bien podría aplicársele el viejo y conocido refrán: “Mucho ayuda el que no estorba”.
De hecho, la forma torpe y falta de compromiso con que se condujo ese organismo que se supone encargado de procurar justicia pronta y expedita en el caso que involucró a estudiantes de Ayotzinapa y elementos de la Policía Estatal, fue solamente la gota que derramó el vaso en algo que prácticamente era ya insostenible, con una fiscal que en los dos años que duró en su encargo se dedicó más a dar problemas que resultados.
Con todo y que se trata de un órgano autónomo en su operatividad, no se debe olvidar que el nombramiento del o la titular pasa necesariamente por el Congreso del Estado a propuesta del titular del Poder Ejecutivo, y por éste directamente cuando los diputados no logran los consensos en las propuestas que se le envían, como sucedió en el caso de Sandra Luz, en donde la gobernadora ejerció la facultad que le confiere la ley y la designó de manera directa.
Y así como en los últimos días del 2021 Evelyn Salgado hizo valer ese derecho, lo mismo está haciendo esta vez, sin dejar desde luego la diplomacia al anunciar que pediría su remoción, por no decir que se trataba de un cese fulminante. Es curioso y hasta chusco que la teniente coronel, tan laureada como se dice que ha sido en su carrera como militar, no entienda que lo que anunció la gobernadora fue una orden, y que en el ámbito castrense es bien sabido que las órdenes no se discuten, se acatan.
Decir por medio de un comunicado que no se irá mientras no se cumplan los procedimientos jurídicos y constitucionales es, como se dice en la jerga política, dar patadas de ahogado o si me lo permiten, hasta un capricho, pues al final no le quedará otro camino más irse con la cola entre las patas, cuando tuvo la oportunidad de con toda dignidad presentar su renuncia y llevarse consigo a todos esos mandos militares que no le ayudaron mucho y por lo tanto se tendrán que ir también.
Por cierto, el refrán de “mucho ayuda el que no estorba” implica no solamente el sentido literal de la frase, sino también nos recuerda la necesidad de rodearnos de gente honrada, trabajadora, empática, optimista, alegre, generosa. Ese será el nuevo reto para el o la nueva Fiscal, en cuyo nombramiento esperemos que, ahora sí, el Congreso de Guerrero logre los acuerdos y consensos para seleccionar al mejor perfil. Vale.