- ¿Dónde están los desaparecidos?
Por Roberto Santos
“¿A dónde van los desaparecidos?
Busca en el agua y en los matorrales.
¿Y por qué es que se desaparecen?
Porque no todos somos iguales.
¿Y cuándo vuelve el desaparecido?
Cada vez que los trae el pensamiento.
¿Cómo se le habla al desaparecido?
Con la emoción apretando por dentro.”
En 1983 Rubén Blades compuso esta canción para relatar microhistorias de persona desaparecidas durante las dictaduras militares en países como Argentina y Chile, durante los años de 1976 a 1983.
Secuestros, asesinatos, torturas, persecución en contra de la disidencia por los miembros de los gobiernos militares, muchos de los cuales jamás fueron encontrados.
Si esta amarga experiencia vivida por poblaciones de países como Argentina y Chile, se pensó que jamás volvería a suceder, en México son las bandas del crimen organizado –algunas en complicidad con autoridades– las que han creado un agujero donde han desaparecido más de 110 mil personas.
Según el diario El Universal, existen 234 organizaciones creadas con el fin de localizar a ese número de personas que, como dice Rubén Blades, han desaparecido “porque no todos somos iguales.”
En su mayoría son mujeres las que buscan a sus hijos, esposos, hermanos o padres, y algunas han pagado con su vida por esa tenacidad que han demostrado por hallar con vida a sus familiares.
El antecedente es Colombia, con 133 236 desaparecidos a manos del narco, los paramilitares y la guerrilla.
En México, fue en el año de 2017 cuando estos colectivos de familiares de desaparecidos lograron la Ley en Materia de Desaparecidos y la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas, así como las comisiones de búsqueda estatales.
En Guerrero hay más de cuatro mil personas desaparecidas, según Ivón Alvarez Gil, del Colectivo “Lupita Alvarez Narciso”, quien señala que cada día más personas engrosan la lista.
Efectivamente, el fenómeno es grave y las autoridades federales no han puesto la atención que los colectivos demandan.
Contrario a eso, existe la intención de reducir el número oficial de desaparecidos, como si con eso pudieran borrar de la memoria de los familiares el recuerdo indeleble, motor que les mueve para buscarlo incansablemente.
Durante las marchas del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, donde integrantes de los diferentes colectivos, así como familiares de víctimas, gritaron consignas por la localización y presentación de sus familiares, el presbítero Filiberto Velázquez Florencio, director del Centro Minerva Bello, destacó que las autoridades han sido rebasadas por el problema de los desaparecidos.
Y en su homilía reprochó no solo a las autoridades por “su falta de compromiso”, sino que incluyó a la sociedad por no ser solidaria con los familiares.
Acusó de la existencia de una sociedad y de autoridades faltos de compromiso con la justicia y la paz, derivado de la polarización existente.
Así como de la pérdida de la solidaridad y que solo piensan en los placeres y en el poder.