Epístolas Surianas De julio Ayala Carlos
*Diputados mezquinos
Junio 12, 2020/admin/no hay comentarios
(Carta a Don Héctor)
• Diputados mezquinos
Por Julio Ayala Carlos
MEZQUINOS, CUANDO MENOS, es lo que puede decirse de los diputados de Morena en el Congreso del estado, que en estos tiempos de pandemia por el coronavirus, y de la crisis económica que atraviesa el país, se opusieron a que en Guerrero operen los comedores comunitarios, los mismos que dan de comer a miles de guerrerenses debido a la precario de su situación económica.
Y es que no es posible que los diputados locales, que se dicen representantes populares, se opongan a la instalación de los comedores de referencia, precisamente cuando más se requiere de ellos, es decir, cuando más se requiere que distribuyan comida gratis, no solo en las ciudades más importantes del estado, sino incluso en las comunidades rurales.
En efecto, no se entiende la postura de los diputados, de estar en contra de los comedores, y porque además su operación beneficia a los más pobres del estado, precisamente a los dicen defender los diputados de Morena.
Hay que decir que no solo el gobierno del estado ha instalado comedores comunitarios en favor de las familias más pobres, en diversas ciudades de la entidad, sino que también los han puesto en operación los gobiernos municipales de Chilpancingo y Acapulco, como parte de un programa alimentario que entrega comida caliente a quien lo requiere.
Ciertamente, hay que decirlo, no son pocas las familias que producto de la pandemia del coronavirus, se han quedado sin ingresos en razón de que muchas empresas y negocios de todo tipo, principalmente en Acapulco, Chilpancingo, Iguala, Taxco, Zihuatanejo y Tlapa, han parado sus actividades o en su caso han desaparecido, razón por la cual se han perdido empleos y en consecuencia, carecen de recursos incluso para poder comer, de ahí que las autoridades, municipales y estatales, hayan decidido implementarlos en apoyo de los que menos tienen.
Y sin embargo, decíamos, los diputados de Morena en el Congreso del estado decidieron pronunciarse en contra, con el argumento de que tienen un objetivo político, y con ello beneficiar a un partido, cuando en estos momentos, debe puntualizarse, lo que importa es el apoyo en favor de los que menos tienen, esos que en el discurso defiende el partido del Presidente.
Hay que decirlo, una y otra vez. Se tiene que ser muy mezquino, tener una mente podrida y un corazón envenenado, además de insensible y perverso, como para estar en contra de los comedores comunitarios, no solo los que instaló el gobierno del estado y que opera personal de la Sedena y la Marina, sino también los que implementaron los alcaldes de Acapulco y Chilpancingo, con el único fin de apoyar a los más pobres del estado.
No obstante, no habría por qué sorprendernos de la actitud de los diputados locales de Morena, pues el Presidente de la República, al inicio de su gobierno, desapareció los comedores comunitarios que existían a lo largo y ancho de Guerrero, con el argumento, nunca probado, de que en su operación existían actos de corrupción. Dichos comedores, que eran de una gran ayuda para los sectores más vulnerables, como ancianos, niños, madres solteras y discapacitados, simplemente desaparecieron de un plumazo, cuando su operación era de vital importancia, como muchos otros programas implementados por gobiernos anteriores con el fin de beneficiar a quien más lo necesitara.
Reitero. Es mezquino, perverso, y hasta criminal, que los diputados del partido del Presidente de la República, que se ufana en decir que está del lado de los pobres, se opongan a los comedores comunitarios en donde se entrega comida gratuita a quien lo solicita. No se entiende, ciertamente, el que hayan llegado a la diputación con el voto mayoritario de los pobres, y ahora, cuando se requiere de su ayuda, se opongan a que les entregue comida, precisamente cuando más lo necesitan, cuando carecen de un empleo y de ingresos para poder sobrevivir a la pandemia del coronavirus y la crisis económica que azota al país.
Sí. Es triste aceptar que aquellos que en campaña decían estar con los pobres, aquellos que eran esperanza de los que tienen poco y a veces nada, hoy se opongan a que el gobierno les dé comida.
Oponerse, ya lo dije, es ser mezquino, es tener una mente podrida y un corazón envenenado; es pues, ser una persona ruin.
Por último, si la política es servir, no se entiende entonces qué papel juegan los diputados de Morena, algunos de los cuales pretenden repetir en el cargo o convertirse en alcaldes, aunque ya se vio, en ésta, como en otras ocasiones, que no apoyan a sus electores, que no ven por ellos cuando más lo necesitan, como ocurre ahora con los comedores comunitarios. No se ve en ellos, su compromiso de servir, y mucho menos, el amor al prójimo.
Pero eso sí, no lo dude, en la campaña que viene, ahí los veremos visitando a la gente, engañándola de nueva cuenta, diciéndoles que ellos están con los pobres.
Jijos de la…!!!
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