•Apoyos para Guerrero, la demanda de los
diputados al secretario de Gobernación
Por Roberto Santos
Sabemos que la política es inherente al ser humano, por lo que el diálogo debería ser la base de la misma.
Diálogo entre representantes, entre la élite política y la sociedad, entre partidos políticos de distinto cuño, como ejercicio político en una democracia de avanzada.
Y en esto es lo que sucedió en el Congreso local, durante la presencia del secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández, quien fue escuchado con respeto y lo mismo hizo ante las posturas de los representantes de las otras fracciones partidistas, como la de Raymundo García Gutiérrez y la de Héctor Apreza Patrón.
El ejercicio de la escucha política habla del respeto, de una cultura de la pluralidad y de la buena política, como medio para atender las demandas de la población, vía sus representantes populares.
Por eso hay que destacar que Adán Augusto escuchó y respondió con respeto lo planteado por Raymundo García Gutiérrez, representante de la fracción del PRD, quien destacó el debilitamiento de los estados y municipios en materia de seguridad pública.
Ya que se han eliminado programas para destinar esos recursos a la Guardia Nacional y a la Sedena, pero que aun así se culpa a los estados y municipios como factores que contribuyen al clima de violencia.
El perredista pidió que “en vez de utilizar el espionaje contra adversarios políticos, periodistas y defensores de los derechos humanos, éste se utilice para detener a los líderes de las bandas delictivas”.
La de Raymundo es una postura que coincide con la mayoría de las autoridades municipales, las que resienten la falta de recursos para atender ese flagelo que es la delincuencia organizada y la común.
Por su parte, Héctor Apreza, en representación de la fracción del PRI, destacó la naturaleza del estado: rebelde, por la enorme carga de injusticia social.
Dijo que lo que aquí sucede repercute en todo el país, en clara alusión a la génesis de los diferentes movimientos sociales reivindicatorios.
Apreza puso en la mesa la creación de un fondo para estados y municipios para seguridad, en el entendido de que “política pública que no se refleja en el presupuesto, es un asunto que no existe” y planteó al secretario de Gobernación si es que existe una partida en el Presupuesto de Egresos de la Federación.
A la vez que puso la interrogante en la mesa, acerca de qué pasará con los estados pobres, afirmó que la situación de Guerrero debería verse como un asunto de seguridad nacional, y planteo la solicitud al secretario de Gobernación que se destinen más recursos para el estado, y no solo para seguridad, sino atender la pobreza y la desigualdad.
En su planteamiento destacan los temas de infraestructura educativa, productiva, de salud.
Con justa razón señaló que si no se atienden estos temas, la presencia del Ejército no logrará la paz ni la gobernabilidad en Guerrero.
Está claro que este ejercicio tolerante y constructivo, como muestra de los compromisos políticos de los ahí presentes, donde estaba el senador Félix Salgado Macedonio y la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, es parte fundamental de la vida en un estado democrático.
Claro, que también tiene que ver la experiencia y ánimo de llegar a acuerdos del representante de la fracción del PRI, el diputado Héctor Apreza, y de Raymundo García Gutiérrez, del PRD, y la coordinadora de la fracción de Morena, la diputada Yoloctzin, quien ha conseguido crear un clima de armonía y coordinación respetuosa entre los legisladores.
Ante estas interrogantes, el secretario Adán Augusto López señaló la existencia de una bolsa de 27 mil millones de pesos, ubicadas en cuentas detectadas por la Unidad de Inteligencia Financiera, por la Procuraduría Fiscal y por la Comisión Nacional Bancaria, y que de este monto el 45 por ciento será para las fuerzas armadas.
Que el 30 por ciento será para los estados y el resto, 25 por ciento, será para los municipios, para tareas de seguridad.
El secretario de Gobernación, quien es otro de los candidateables para la presidencia de México, retomó la propuesta de mantener acercamiento con los Congresos locales y es probable que pronto regrese a Guerrero a discutir la reforma electoral que viene.
Algo que sin duda será muy productivo si es que mediante este funcionario la federación voltea a ver las necesidades de nuestro estado, que si bien la gobernadora atiende puntualmente, no estará de más que mediante la coordinación que ya existe entre gobierno y Congreso se pueda conseguir más apoyos.
De este ejercicio político, quedó la muy clara percepción de que fue un diálogo de altura y puede dar beneficios al estado de Guerrero.
Y además puede ser ejemplo para futuros encuentros.