Chicotazos

  • Ciudadanos que se la rifan

Por Francisco Javier Flores V.

Con la llegada de las lluvias, dos de los grandes problemas que aquejan a los acapulqueños en materia de servicios públicos se hicieron más visibles.

Las fugas de aguas negras por el taponamiento del drenaje y alcantarillado, y las deficiencias en el alumbrado público.

Si ya de por si en toda la ciudad los fétidos olores eran insoportables y por todas partes, incluso en la costera Miguel Alemán, como ocurre constantemente en el área de La Diana, el agua pestilente corre a flor de tierra o pavimento al brotar por las coladeras, con los recientes aguaceros la situación empeoró.

Vertederos de agua sucia con fétidos olores se forman por el taponamiento del drenaje a causa de la basura que de manera irresponsable es arrojada a las calles y canales pluviales, y que combinado con un deficiente servicio de recolección y de limpieza provocan ese grave problema de salud pública y de imagen a nuestro destino turístico.

Afortunadamente, en las últimas semanas un grupo de ciudadanos comprometidos con las causas sociales han decidido poner manos a la obra y provistos de al menos lo necesario para realizar esa aplaudible labor, se han dado a la tarea de ayudar en la reparación de esas fugas de aguas negras.

Se trata de hombres y mujeres conocidos como Equipo Pargo, que siguiendo el ejemplo de su líder, el diputado Joaquín “Jacko” Badillo Escamilla, el llamado Pargo de Acapulco, se preocupan por el bienestar de los acapulqueños y recorren barrios, colonias populares y comunidades rurales ayudando en lo que se pueda.

Así, se les puede ver también con personal capacitado en esos menesteres, reparando luminarias del alumbrado público que se encuentran en mal estado o colocando nuevas lámparas donadas por Jacko El Pargo, de tecnología LED que se cargan con energía solar y que han causado sensación en zonas como Real Hacienda, Arroyo Seco, El Capire, Ciudad Renacimiento, Los Electricistas y muchas colonias más de la periferia que ahora lucen iluminadas.

A ello hay que añadir brigadas que arreglan baches, que distribuyen pipas de agua a familias y escuelas, láminas galvanizadas, aparatos funcionales como sillas de ruedas, andaderas, bastones, gestionados por el diputado y su esposa, la señora Alejandra “La China” Mena Zuzuarregui a través de la fundación JACKOmienza, entre otros muchos apoyos más.

Como dice la chaviza hoy en día, no hay duda que el Equipo Pargo, como buenos acapulqueños, se la anda rifando por sus paisanos.

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