- El partido debe reorganizarse y ser autocrítico, dice Miguel Angel Hernández
Por Ricardo Corte Rojas
Ante los resultados nada alentadores de las pasadas elecciones del dos de julio que trajo como consecuencia la pérdida del registro nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el ex secretario de prensa de la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Miguel Ángel Hernández Albarrán, advirtió que si el tricolor en Guerrero no se reorganiza ni hace autocrítica va también camino a la extinción.
Dijo que el dirigente estatal de ese instituto político no puede ni debe echar las campanas al vuelo por el hecho de que de acuerdo a los resultados electorales de las pasadas elecciones el tricolor haya logrado colocarse como la segunda fuerza política a nivel estatal, pues subrayó que el líder priista en Guerrero no ha tomado en cuenta no quiere reconocer que la votación alcanzada dejará al PRI de Guerrero sin prerrogativas suficientes para mantener vivo al partido, porque no alcanzará para solventar tantos gastos.
Hernández Albarrán también cuestionó que en la reciente reunión del Consejo político estatal no se haya puesto sobre la mesa la renovación de las dirigencias del PRI a nivel estatal y de los municipios de las ocho regiones de la entidad tras los desastrosos resultados alcanzados en la elección del pasado dos de junio.
“¿Quién va a sostener a los empleados del PRI del estado cuando las prerrogativas disminuirán?”, preguntó al reportero, al mismo tiempo que subrayo que por eso no hay nada que festejar de los resultados de las pasadas elecciones, pues recordó que el tricolor sólo pudo retener el municipio turístico de José Azueta (Zihuatanejo).
El también consejero político del Revolucionario Institucional recordó que los resultados de las cuatro mesas de trabajo en las que participaron más de 300 consejeros y que se instalaron con la intención de buscar hacer algunas modificaciones al interior del PRI estatal, solo es rescatable el cambio al código de ética.
Por lo anterior insistió en que si el PRI no entiende que se tiene que reorganizar y aceptar la autocríticas sobre las fallas que tiene al interior, el panorama no es nada alentador porque va que vuela camino a la extinción.