- Calentura electorera y Gobierno Solidario
Por Francisco Javier Flores V.
En los días más álgidos de la limpieza y reconstrucción de Acapulco, cuando parecía que los montones de basura y escombro eran interminables y el Gobierno Municipal no daba señales de vida, vino una acometida del Gobierno Estatal para empujar los esfuerzos que habían dejado de hacerse desde lo local.
Brigadas de limpieza en donde participaron empleados de las diferentes dependencias estatales, equipos políticos de diputados locales, organizaciones afines al senador Félix Salgado Macedonio, entre ellos los llamados Toritos, la CUA, ambientalistas y ciudadanos comunes, entre otros, se sumaron a esas tareas.
Así se avanzó de manera considerable en el despeje de las banquetas de la costera Miguel Alemán, se atacaron verdaderos focos de infección que representaban las toneladas de basura putrefacta que despedían olores fétidos.
A esa iniciativa, el gobierno municipal respondió no solamente con indiferencia, sino incluso con desdén. Es decir, no se sumó, pero sí criticó que otro orden de gobierno viniera a hacer lo que en lo local no se hacía.
Actualmente pareciera que pasa una situación similar.
Quien gobierna Acapulco y por extraño e increíble que parezca fue reelecta para un periodo más, es evidente que ha dejado de lado esa obligación y está ocupada en arrancar precampaña para competir en el 2027 por la grande de Guerrero.
El caso es que los acapulqueños de momento están hasta el copete de política electorera y lo que necesitan y exigen son servicios, que les resuelvan el problema de falta de agua, de recolección de basura, de arreglo de calles, alumbrado público.
No es de extrañar, entonces, que nuevamente y de manera solidaria, no con el gobierno municipal, sino con el pueblo de Acapulco, haga presencia el Gobierno del Estado para dar atención extraordinaria, haciendo lo que aquí deja de hacerse porque quienes gobiernan el puerto traen encima la calentura electorera.
A final de cuentas, Acapulco también es Guerrero.