• ¿Días de guardar de un ex gobernante?
Por Alfredo Guzmán
En el interior de su casa, invadiendo espacios, en fin de semana, llegué, soy invitado a tomar un café, con las reservas a que obliga ser un ex gobernador de reciente actividad e invitar a un periodista a su hogar. En su casa, hay mucha actividad, se prepara una reunión familiar, con motivo de que una sobrina, va a realizar un anuncio importante.
Antes de entrar, supuse que no había nadie, me citó a las 12 del día y me paro frente a su puerta y no veo a nadie. No hay timbre, sólo una antepuerta metálica y no encuentro la forma de hacerme notar y en broma grito como en la tienda. “Quierooooo”. Mirando a las cámaras externas.
Un breve tiempo después se abre la puerta de entrada y me invitan a pasar. Me siento en un sillón y espero.
Un abrazo refrenda el respeto mutuo, de político a periodista.
“Me agrada verte, rato que no te veía”, -dice. “¿Cómo estás?” cortesía de político. “Apenas son 6 meses,” le digo. Y respondo, “Sigo vivo y lo demás no me importa mucho”, respondo para romper el protocolo. Risas.
Amplia sala de estar, “un café, agua, qué quisieras”, -Un café, sería excelente”. Son las 12 del día sábado y el clima está fresco y el jardín se observa cuidado. Da instrucciones y regresa.
-Y usted, cómo vive alejado del bullicio y de la falsa sociedad-, ironizo -¿cómo sigue la salud, pues me enteré de una situación.”
“Ahí la llevo, Ya antes me habían operado, pero nada complicado.”
-¿Y qué ha cambiado?-
“Todo, las prisas, las reuniones, las giras, las instrucciones, los problemas, la solución y el ambiente del poder. Todo cambia, no extraño nada, al principio te pasmas, poco a poco llega la tranquilidad. La familia, los nietos, las risas, los encuentros, las comidas y los juegos. Todo cambia.”
-Y la barba-, comento. Risas. “Pues sí, es una forma de establecer que estoy sereno, en calma, sin prisas, en familia. Relajado.” -Le informo que su fan número uno en casa ha manifestado que no le gusta con barba crecida. Risas fuertes, de nuevo.
-¿Y qué sigue?, insisto. “Por lo pronto nada, la familia y estar tranquilo. Me preocupan algunas situaciones, pero sólo observo. No asisto a Chilpancingo, salvo excepciones para evitar, suspicacias. Soy creación guerrerense y me debo al estado, Me ha permitido todo, soy lo que soy, gracias a mi estado natal, que ha sido generoso conmigo y con la familia. Hemos apoyado y aportado datos que nos pidieron y hasta ahí. Tenemos una relación cordial y de respeto con el nuevo gobierno y con la Gobernadora Evelyn Cecia Salgado Pineda y su padre.”
“Queremos que les vaya bien. La mesura nos acompaña y nos obliga a ser respetuosos. Deseamos que las cosas, sigan controladas, que el nuevo gobierno, haga su experiencia y no opinamos, no intervenimos y andamos en stand bye.”
“Gobernar un estado como Guerrero, siempre es complicado, pues hay muchos rezagos y demandas, pero el nuevo gobierno está haciendo su tarea, atiende, platica y resuelve. Eso importa y la gente lo debe ver.
“Recuerdo mis primeros meses, fueron de mucha presión y luego de eso, caminamos, controlamos y sembramos orden y paz.”
-Pero ya anda reuniéndose con ex gobernadores, le recuerdo.
La cara se ilumina- “Bueno, hemos estado platicando temas actuales de interés con ex gobernadores, con políticos de otros tiempos y nos ayuda a estar en ritmo y no sentirnos solos, pero sólo son cosas de ex gobernadores, sin ninguna pretensión. Sólo platicamos.”
¿Es como una Conago, de ex gobernadores? “Eso, un grupo de opinión, que esperamos surjan otros, como en otro tiempo el grupo San Ángel, que opinemos sobre lo que nos gusta, que es la política, pero sin ofender a nadie, ni presionar.”
“Quiero escribir un libro, para relajarme y entretenerme y llevármela tranquila, ocupado y recordando, eso debemos hacer quienes ya fuimos.”
“Soy institucional, soy respetuoso y seré factor de apoyo en caso de que se me solicite algún dato, sobre la administración que presidí. Hemos cumplido con los informes y aquí estamos, para lo que nos soliciten.”
“Deseamos que la gobernadora Evelyn Cecia Salgado Pineda, tenga el apoyo federal, porque muchas demandas son financieras y que logre el papel que le demanda la sociedad guerrerense, que serán quienes habrán de opinar.”
“Yo, ya terminé.”
-Por cierto, licenciado y qué quedó de los gritos y rechiflas que le hicieron en Tlapa cuando recién llegaba el presidente de México, Andrés Manuel a Guerrero de visita.
“Creo que al presidente le quedó claro que no era por ahí, luego se quiso repetir en la Tierra Caliente, pero igual, los controló y de ahí surgió un trato diferente, respetuoso. Terminamos en excelentes términos.”
¿Y le ofrecieron ser embajador?
“Sí, me lo ofreció. Pero no hubo más. Lo más importante es que dos días antes de terminar mi periodo, me mandó llamar, fui y me dijo que no podía asistir al cambio de poder, pero me dijo que quería abonar a la gobernabilidad del estado y le mencioné de nuestras necesidades y las resolvió. Con eso quedamos más que satisfechos, todos y todas.”