• El pleito de Yoloczin contra Beatriz Vélez
• Acusa y miente, que algo habrá de quedar
De Julio Ayala Carlos
COBIJADA POR EL FUERO QUE TIENE, la diputada local de morena, Yoloczin Domínguez Serna, no sólo miente y acusa a quien quiere y le estorba, sino que con total impunidad, desde su condición de representante popular, mancha honras y pone en peligro, en un momento en el que la inseguridad es crítica en Guerrero, la integridad física de quienes considera sus enemigos y pretende destruir. Es el caso de la secretaria general de la sección 36 del SNTSA, Beatriz Vélez Núñez.
En efecto, Domínguez Serna, que repite como diputada, se ha enfrascado en destruir a la secretaria general de la sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud Guerrero (SNTSA), primero con un punto de acuerdo presentado en el Congreso del estado, el cual fue desechado para su aprobación inmediata y enviado a comisiones, en el que propone una auditoría a la sección sindical, y luego, denunciando supuestas amenazas, para después publicar un presunto recibo del salario mensual que percibe la dirigente de los trabajadores de salud, el cual resultó falso, y en consecuencia, carente de toda veracidad.
Ciertamente en política los pleitos son frecuentes, y más cuando se intenta destruir al adversario o al enemigo como los ve Yoloczin Domínguez. Sin embargo, la diputada no sólo se aprovecha de la posición que tiene al utilizar la más alta tribuna del estado para lograr sus fines, sino que también hace uso del fuero que ostenta para mentir y actuar con impunidad, toda vez que los diputados, como los senadores, no pueden ser reconvenidos en sus declaraciones en el desempeño de sus cargos.
Miente, acusa y señala, que al final algo queda, dice el refrán, y es precisamente lo que hace la diputada de morena, aunque también se evidencia como ignorante de la ley, e incluso, de lo que declara. Y es que en el caso de su propuesta de auditar a la sección 36 del SNTSA por presuntos señalamientos de corrupción, a instancias de sus compañeros de partido, no sólo muestra que desconoce la vida sindical, sino la propia ley, toda vez que los sindicatos de trabajadores gozan de autonomía ante el poder público, debido a que los organismos gremiales funcionan con recursos de los propios sindicalizados y no del gobierno.
Claro, es obvio que eso no lo sabe la legisladora, y en consecuencia su propuesta fue rechazada en el acto, por lo que fue enviada a comisiones, lo que ocasionó que inventara amenazas en su contra por parte de Beatriz Vélez Núñez, en base a una conversación telefónica que ambas habían sostenido. “Me amenazó”, denunció la diputada, hecho que fue desmentido por la dirigente sindical con el audio de la llamada.
Este lunes, en un hecho que muestra la fobia que tiene la morenista contra la también exdiputada federal, publicó en sus redes un presunto recibo del también presunto salario que recibe Vélez Núñez como trabajadora del sector salud, con la cantidad de 99 mil pesos mensuales, situación que desmintió la destinataria del ataque, quien con un recibo oficial demostró que su percepción es de 14 mil pesos quincenales, debido a que su categoría es de “Enfermera jefa de servicio”.
Es decir, además de mentir, porque el recibo publicado por Yoloczin Domínguez Serna carece de membretes oficiales, pone en peligro la integridad física de Beatriz Vélez Núñez al hacerla visible para la delincuencia organizada en momentos en que la inseguridad pública se ha agudizado.
Por cierto, si bien es cierto que la morenista publica también un recibo de su supuesto salario como diputada local, en el cual presuntamente su percepción es de menos de 40 mil pesos mensuales, habría que preguntarle cuánto es el ingreso que obtiene por “gastos de gestoría”. El referido, de acuerdo a algunos legisladores, asciende a 200 mil pesos.
En fin. En el fondo lo que está en juego es apoderarse del sindicato de los trabajadores de la Secretaría de Salud, máxime que morena tendrá a partir del 15 de octubre próximo, es decir, en menos de 20 días, una gobernadora de su propio partido, quien por cierto, durante la reunión que sostuvo con Vélez Núñez, hace algunos días, acordaron trabajar al parejo por el bien del estado. Por supuesto, eso no lo entiende Yoloczin Domínguez Serna, quien tampoco le importa mentir y acusar sin pruebas, aún y cuando la agraviada sea una mujer como ella.
Dice el dicho: mujeres juntas, ni difuntas…
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