¡
- Legislar por Guerrero y Acapulco
Por Jacko Badillo
Hay quienes dicen que en cuestión de leyes ya todo está escrito, que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos es una de las mejores a nivel mundial y que lo que la sociedad en realidad requiere no son más leyes o modificaciones sacadas de la manga, sino aplicar lo que ya está establecido en nuestro marco jurídico, hacer que se cumpla.
Como representante popular de los guerrerenses y particularmente de los acapulqueños que me eligieron para ser su voz en el Distrito 09 local, y por lo cual a partir del próximo primero de septiembre estaré rindiendo protesta como diputado de la LXIII Legislatura, creo que algo que debe prevalece es el sentido común.
Sé de diputados en funciones o del pasado reciente que se jactan de haber presentado decenas de iniciativas de leyes, propuestas de reformas, puntos de acuerdo y demás para aparentar que son productivos, aunque en los hechos ninguno de esos planteamientos se ha visto reflejado en beneficio de la sociedad, incluso no tanto porque no fueran viables, sino porque no se les dio el seguimiento adecuado.
Por eso con mi equipo de trabajo, aún antes de comenzar el periodo para el que fuimos electos, estamos trabajando ya en el análisis de las leyes, reglamentos, bandos y demás normas de carácter local, a fin no de abrumar a la siguiente legislatura con propuestas, sino de determinar qué es lo que realmente requiere ser modificado, detectar posibles lagunas, tibiezas, excesos, de tal manera que lo que vayamos a producir en materia legislativa sea de calidad, y no en cantidad.
Eso sí, mucho de lo que propongamos, será el reflejo de lo que hemos escuchado de manera directa de los ciudadanos, del cúmulo de propuestas, recomendaciones, sugerencias que nos hemos encontrado a lo largo del camino que hemos recorrido no solamente en tiempos de campaña, sino en todo nuestro andar que es de años por el territorio.
Vamos a legislar por Guerrero y Acapulco, y vamos a hacerlo con mucha responsabilidad, con la voz del pueblo. Mientras tanto… ¡Jálalo que es pargo!