- Actividad altruista de la asociación Guerrero Sonríe, con donaciones de empresarios y sociedad civil
Acapulco, Gro., a 25 de Mayo de 2021.- A pesar de la pandemia la Asociación Guerrero Sonríe concluyó durante el fin de semana una jornada de operaciones de labio y paladar hendido a niños y niñas de diferentes regiones del estado, las cuales permanecieron suspendidas con motivo de la emergencia sanitaria por el Covid-19.
Hoy, gracias a la donación de algunos empresarios nacionales y sociedad civil la asociación podrá continuar con este proyecto para beneficiar a los pacientes con labio y paladar hendido.
A partir del surgimiento de la pandemia de Covid-19, todos los procedimientos, cuidados y protocolos sanitarios se modificaron, para garantizar la seguridad de los infantes que los médicos intervienen, aunque de inicio, las operaciones fueron suspendidas, al no tratarse de una operación esencial, explicaron especialistas.
Óscar Romeo Hernández Baños, presidente de Guerrero Sonríe, explicó que “básicamente lo que hacemos es la atención de pacientes con labio y paladar hendido, tratamiento integral, terapia de lenguaje, ortopedia prequirúrgica, injertos óseos”.
El médico cirujano maxilofacial explicó que “desde que se activaron nuevamente las cirugías de labio y paladar hendido, en Guerrero Sonríe hemos podido operar un aproximado de 25 pacientes, mejorando con ello su calidad de vida”.
Resaltó que “este fin de semana vivimos una jornada donde cuatro bebés fueron operados, gracias al apoyo de la sociedad civil y empresarios de la ciudad de México, quienes en días pasados nos invitaron a participar en un torneo de golf, donde la Asociación tuvo la oportunidad de recibir donativos que han sido de gran ayuda”.
Enfatizó que estas jornadas son permanentes, ya que cada mes se programan pacientes para estas cirugías, por lo que para junio ya hay seis niños listos para ser intervenidos.
Elizabeth Pozos Alcántara, médico anestesiólogo, explicó que “conformamos un equipo, todos los que participamos, médicos, anestesiólogos, pediatras, enfermeras, quienes están dentro y fuera del quirófano”.
Detalló que “con niños pequeños se requiere tener experiencia, no es fácil, se requiere que todos los que participan ya hayan participado en este tipo de cirugías, ya que tiene un riesgo alto, pues se trata de la vía oral.”
Resaltó que “nos apegamos a los protocolos. Los pacientes vienen con todas sus pruebas de laboratorio y valorados por el pediatra, para darle seguridad al procedimiento”.
La madre de familia, Norma Lilia Hernández Manzano, mencionó que “es muy satisfactorio recibir esta ayuda, a mi niña ya se le ve un resultado”. y de la emoción que vivimos algunos lloramos, otras se desmayan de la emoción; es algo que no se puede creer, en esta asociación nos dan: los alimentos, el hospedaje, no lo podíamos creer, de verdad son unos ángeles por la forma en que nos tratan. Fotos : Bernandino Hernández
