- El duro mensaje de Porfirio Muñoz
Concientización, para disminuir contagios de Covid-19: HAF
Más jóvenes a las listas de aspirantes a cargos de elección
Por Roberto Santos
Hasta parece que el senador Morenista Porfirio Muñoz Ledo trae línea para imponer la línea dura en su partido.
Todavía no tiene la presidencia de Morena y ya anuncia que expulsará a Ebrar y a Mario Delgado de lo que construya.
Un partido de izquierda es su meta, dice, y manda directo el mensaje al secretario de Relaciones Exteriores para que éste construya uno de derecha.
Esto sin duda, no es un error, y tiene el propósito de sacar a Marcelo Ebrar de la carrera presidencial.
El error es que este mensaje contiene un tono autoritario, siendo uno de mayores defensores de la democracia en el país.
Mal inicia Porfirio cuando trata de imponer su punto de vista y amenace con expulsar a quienes no coinciden con él, cuando un partido no es propiedad personal.
Claro que está mandando un mensaje de poder, pero autoritario, porque ya anuncia como deben pensar y actuar los integrantes de su partido.
Para muchos debería ser preocupante porque está planteando imponer su punto de vista, su percepción de lo que debe ser su partido y como deben actuar sus integrantes, ajustados a lo que él piensa, en un mundo de ideas, diálogos, percepciones y conductas, que no necesariamente pueden estar equivocadas al no coincidir con las suyas.
En fin, veremos en qué termina esto, que parece ser la génesis de un enfrentamiento que desembocará en un cisma interno de este movimiento que no logra constituirse como partido.
Pero al parecer ese es el propósito, expulsar al ala moderada, negociadora, en aras de la imposición de aquellos que pretenden quedarse con Morena para imponer su visión de país que pretenden construir.
EN OTRO TEMA, HABRÁ que reconocer la postura del gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, quien anuncia que no está en su idea utilizar la fuerza pública para imponer el uso de cubrebocas.
Es decir, rechaza las acciones autoritarias de gobierno, pese al crecimiento de los contagios y de que parte importante de la población no participa solidariamente con sus congéneres ni con las autoridades municipales, estatales y federales.
Más bien, señala que intensificará las campañas de concientización ciudadana.
Astudillo Flores tomó como ejemplo al estado de Jalisco, donde los resultados fueron negativos al utilizar la fuerza pública. En este estado, policías municipales perdieron el control de la fuerza al detener a un ciudadano y terminaron asesinándolo por no portar cubrebocas.
El gobernador señaló su disposición de usar campañas de concientización y seguir apelando a la participación ciudadana.
“No estamos en un momento cómodo”, reconoció, “porque los casos de coronavirus están en aumento después de que se había registrado una disminución”, y anunció que este lunes dará a conocer una serie de medidas para seguir reforzando las acciones que permitan disminuir los contagios.
Estas medidas serán en cambios en porcentajes de ocupación, y que serán más enérgicos con los lugares que deben estar cerrados y cuidarán los que tengan mayor afluencia, expresó.
El gobernador tiene razón al señalar que el problema del coronavirus es colectivo por lo que la solución también debe ser colectiva, debido a que no solo las autoridades se ven afectadas con los contagios.
Por mientras se han visto que las medidas que se están aplicando son más estrictas en comercios y transporte.
Aunque deberían ser más estrictos con los Oxxos y las tienditas de las esquinas, que nunca han cumplido a cabalidad estas medidas. En estos negocios quien quiera puede entrar sin cubrebocas.
EN TEMAS ELECTORALES VEMOS CON GUSTO como se suman más jóvenes a la lista de aspirantes a un cargo de elección popular.
Y esto es valioso para la vida democrática de un país, estado o municipio, al dar espacios de participación a otras y otros que demuestran interés en ser parte de las decisiones claves en la construcción de la cosa pública.
Esas acciones solidarias son las que deben ser la base para que la gente les reconozca el trabajo comunitario y, eventualmente, llevarlos a las urnas.
Ese es el claro ejemplo del ingeniero Alberto Adame Santos, quien junto con su familia y su Asociación Civil Ayuda con el Corazón dedica varias horas a la semana a donar comida, gel, cubrebocas, a rastrillar calles en algunas colonias de Chilpancingo, entre otras acciones.
Su planteamiento es ser solidario y demostrar a la gente que se les puede acercar sin pedir nada a cambio, y sí para compartir lo poco que con su trabajo honesto ha obtenido.
Como parte de la sociedad civil tiene mucho futuro en la vida pública, porque, como asegura, ésta no debe ser exclusiva para los políticos.
Otro joven es César Armenta, quien se ha visto activo otorgando apoyos a personas vulnerables en este momento de crisis de salud y económica, es un serio aspirante a la presidencia municipal de Chilpancingo. Para el mismo encargo pugna Jaime Ramírez Solis, quien igual ha estado actuando en consecuencia para apoyar a la población necesitada de Chilpancingo.
Ambos son relativamente jóvenes y podrían ser parte de un cambio generacional tan necesario en la vida política del estado.
Otro destacado priista es el doctor Gustavo Alarcón, cuya organización “Ignacio Manuel Altamirano”, permanentemente ha mantenido trabajo de gestión con familias de las distintas colonias de Chilpancingo, a quienes les lleva materiales de construcción hasta medicamentos.
Hoy, Gustavo tiene ofertas de varios partidos políticos para que pueda contender por sus siglas.