Sospechan que víctima de Coronavirus se infectó en hospital donde fue atendido

• José Luis Jaimes Altamirano ingresó al Magallanes con un cuadro diarreico; sin embargo en la causa de defunción anotaron «neumonía atípica», señala uno de sus hermanos

Por Francisco Javier Flores V.

Familiares de José Luis Jaimes Altamirano, una de las presuntas víctimas del COVID-19 (Coronavirus) en Acapulco, denunciaron posible negligencia del hospital Magallanes, por no darle un tratamiento adecuado al cadáver tras ocurrir el deceso, lo que les hace sospechar que, incluso, el hoy occiso pudo haber contraído el virus en ese nosocomio.
Jaimes Altamirano, de 53 años, arquitecto y destacado priísta, ex integrante de la llamada Mesa 55 del restaurante VIP’s de Galerías Acapulco, de cuyos asiduos también falleció recientemente el líder sindical Salvador Vargas Villanueva, entró al mencionado hospital con un cuadro diarreico y de diabetes, con elevados niveles de glucosa en la sangre, lo que incluso le provocó un desvanecimiento que, al caer, le ocasionó una fractura en la cadera.
Sin embargo, el día 28 de marzo, a las 01:50 horas, fue declarado muerto a causa de una «neumonía atípica», según se lee en el certificado de defunción expedido por la Secretaría de Salud, en donde consta que el deceso ocurrió dentro del hospital privado Magallanes, sito en el número 2 de la avenida Wilfrido Massieu, del fraccionamiento Magallanes.
Con ese documento, a decir de Guillermo Jaimes Altamirano, hermano de la víctima, el hospital les entregó «sin mayor problema» el cuerpo, además de que una doctora les dijo, incluso, que «no creía que haya tenido Coronavirus».
El problema -prosiguió Guillermo- fue que algunos medios de comunicación ese mismo día comenzaron a manejar la versión de que el arquitecto había fallecido víctima del COVID-19 y dos días después, en conferencia de prensa, el mismo secretario de Salud, Carlos de la Peña Pintos, acompañado del gobernador Héctor Astudillo Flores, confirmaban que se trataba de la primera víctima registrada en Acapulco de la pandemia.
«Yo hablé por teléfono el lunes (30 de marzo) con un supuesto encargado del Magallanes, exigiéndole respuestas. Lo único que hizo fue preguntarme si era abogado. Yo creo que la gente debe saber, porque en ese hospital había la sospecha de que dos pacientes tenían Coronavirus, pero no lo decían», señaló.

• Es decir, ¿ustedes sospechan que ahí pudo haber contraído el virus?

• Es muy probable…
  Guillermo Jaimes insistió en que su hermano ingresó al hospital con un cuadro diarreico, y para demostrarlo, proporcionó al reportero copias de recetas expedidas en otros consultorios donde se atendió previo a ser ingresado en el Magallanes, considerado uno de los mejores hospitales de Acapulco.
  El denunciante dejó en claro que su inconformidad es por el manejo de la situación. «El hospital nos entregó a mi hermano diciendo que no había problema, que lo podíamos velar, sin las medidas sanitarias y arriesgando a más gente. Si a nosotros nos hubieran informado correctamente hubiéramos hecho lo propio. Nuestra molestia es que hicieron que pusiéramos en riesgo a nuestra familia y amigos, por negligencia del hospital. Creo que se tiene que informar, que la gente que estuvo en contacto y presente algún síntoma, que el hospital se haga responsable y los atienda», concluyó.
  Cabe mencionar que el otro fallecido, Salvador Vargas, fue atendido en el hospital regional Vicente Guerrero, del IMSS, y en su hoja de defunción se especifica que ingresó el 25 de marzo con una «neumonía debida a otro virus»; y egresó el 31 de marzo, día en que murió víctima de una «neumonía no especificada».